Martes por la tarde.
Una clienta entra en la peluquería y me pregunta:
- ¿Me podrías hacer un peinado de novia?. Es que me caso y me gustaría que me lo hicieras.
- Pues claro que sí. ¡Enhorabuena!. Y, ¿cuándo es la boda?
- Mañana al mediodía - contesta.
"Glups"
Miércoles a las nueve y media de la mañana. La chica lleva una tiara preciosa para el peinado. Primero tenemos que hacer el color, claro. Le hacemos uno de diez minutos de duración, ideal para cuando tenemos un poco de prisa.
Al ratito vino un señor que nos trajo el velo.
Como la chica tenía el pelo largo, le hicimos un marcado con tenacilla dejándole unos bucles bastante grandes. Luego le recogimos los laterales, dándole más volúmen a la altura de la coronilla y un pequeño tupé para ponerle la tiara. Los rizos se los definimos con cera y por último le colocamos el velo.
Lástima que no tenga ninguna foto (no dió tiempo).
La chica se fué encantada con su peinado y a las doce estaba casándose. Misión cumplida.
Un saludo¡¡¡
No hay comentarios:
Publicar un comentario